Se ha generado una gran polémica ante el asesinato de cientos de perros en la ciudad de Punta Arenas. Según indican varias fuentes esta cruel matanza tendría estrecha relación con las declaraciones del Obispo Bernardo Bastres, a quién diversas agrupaciones que velan por la justicia de los animales señalan como autor intelectual de la masacre.
Iglesia Católica Responsables Intelectuales
Semanas antes de que aparecieran regados en el centro de la ciudad los cadáveres envenenados, la “autoridad” católica llamó al Minsal a “sacar una norma por el bien de la comunidad, los perros que no tengan dueño se deberían sacrificar”. Otra de las declaraciones que hacen afirmar la relación en las responsabilidades de parte del Obispo Magallánico fue declarar “el Estado debería tener las mismas facultades que en Europa, es decir, si los canes no tienen dueño, el país debería eliminarlos” , pero eso no es todo , en una entrevista con un medio local de su ciudad (hoyxhoy) se le pregunta si su afirmación es contraria a “la palabra del señor” a lo cual el cristiano responde : “Dios creó las cosas y las puso al servicio del ser humano, ese es el principio de la Génesis. Todo está a servicio nuestro, yo no estoy por matar perros por matar perros, porqué eso sería una cosa de barbarie. Pero no puede ser que en este momento tengamos una invasión de perros, y tengan más derechos que nosotros”.
Desde los orígenes de la humanidad la religión se ha utilizado para dar explicaciones a los “fenómenos” que nuestro entendimiento no logra comprender, históricamente tanto monarquías como estados y naciones se han fundamentado en ellas para justificar sus modelos económicos y formas de organización autoritarias, usando como recurso clave de manipulación “el miedo”. Inventan según sus propios intereses personajes ficticios , jerarquías y legados que divinamente se les son concedidos por deidades que castigan con la más grande gama de torturas eternas para todo aquél que se oponga a sus interesadas “verdades absolutas” , craso ejemplo de esto es la Religión Católica, protagonista de cientos de masacres a lo largo de su historia , responsable de asesinar a científicos e intelectuales que han buscado construir una realidad paralela a las imposiciones fascistas de lo que hoy es el “Estado Banco Vaticano”.
No es coincidencia que estos llamados al odio provengan de la misma iglesia que bendice guerras, llama a la constante homofobia y fomenta la desigualdad de género. Es la misma iglesia que tiene como autoridad máxima a un antiguo militante de las juventudes Nazis, la misma religión en la cual en su nombre fueron asesinados, violados y torturados muchos pueblos originarios de Latinoamérica.
El cristianismo es fascismo brazo ideológico del capitalismo. Es hora de decir Basta a esta doctrina tan perjudicial para el destino del planeta, precursora del alineamiento de masas, justificante constante de crímenes y violaciones, táctica perfecta de control de la clase burguesa.
No es casualidad que las escuelas con mayores porcentajes de ingreso a las universidades sean cristianas, ni tampoco que el estado con sus fuerzas armadas juren por “dios y la patria”, es la formula perfecta para controlar nuestras vidas, para dominar nuestras mentes pudriéndolas con sus dogmas involutivos. Tienen la facultad de reducir una vida humana y animal a un número, porque son el capitalismo disfrazado de bondad, son la moral del buen ciudadano del modelo perfecto del sujeto humano o animal convertido en máquina de producción, en cifras y sostenedores de sus acomodadas vidas a costa de la explotación de nuestras vidas.
Las fotografías que ilustran estas palabras corresponden a una manifestación que fue realizada el 17 de enero del 2013 en la plaza de armas de Santiago justamente por una acción más del catolicismo: el Especismo, el cual desde siempre a fomentado e insertado en la sociedad esta fascista practica que implica la transformación de los animales a la calidad de producto , quitando de estos según sus divinas reglas la facultad de sentir y tener la capacidad de desenvolverse libremente en sus entornos naturales.
Como bien mencionamos anteriormente el católico sustenta la desigualdad, la explotación del hombre por el hombre y del hombre ante los animales con dios y su iglesia, su ejército de ángeles, el castigo del fuego eterno del infierno y sus morbosas imágenes de un sujeto crucificado que habla con lagartos y luego resucita desde la muerte para decirnos que estábamos equivocados ,sin más razón que afirmar ser hijo de un dios al que tenemos que someter en primera instancia nuestras voluntades propias como la de nuestros pares a una reglamentación jerarquizada y anulatoria de la libertad y autodeterminación sobre nuestros cuerpos y mentes.
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